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Mendiola: Aprobamos una ley pionera en la lucha contra el dopaje
Según Mendiola, el objetivo de esta ley es “la defensa de una competición deportiva limpia donde no quepan actuaciones antideportivas, ni fraudulentas, ni engañosas de los que son tramposos en la competición, ni tampoco de aquellos que se lucran a su costa, poniendo en serio peligro la salud de los deportistas”.
Una ley que no se limita a la lucha contra el dopaje, sino que establece una visión integral de la protección de la salud en el deporte, en la que se concibe el dopaje como “una amenaza para la salud de los deportistas, para la competición, para el juego limpio y para la propia dimensión ética del deporte”.
La senadora riojana puntualizó que la norma reconoce expresamente las competencias de las Comunidades Autónomas y respeta escrupulosamente el esquema de distribución de estas competencias y explicó que, dado que el sistema normativo de España no se adaptaba a las exigencias de la Convención Internacional contra el dopaje en el deporte, “era necesario legislar, armonizar y homologar nuestro ordenamiento”.
Durante su intervención, Francisca Mendiola reprochó a los socialistas que durante la pasada legislatura no cumplieran ni con los deportistas, ni con el deporte al no adaptar la legislación española a las exigencias de la Convención Internacional contra el dopaje. Razón por la cual, según recalcó, “a España se la señalaba como a un país poco contundente en la lucha contra el dopaje”. “Ahora empezamos a tener el reconocimiento internacional de que por fin se está haciendo lo que se debe”, apuntilló.
Mendiola aseguró que la futura ley será “novedosa y pionera” en la lucha contra el dopaje y el juego limpio y, “lo que es más importante, en la protección de la salud del deportista, ya que se constituye un nuevo modelo de protección de la salud en el deporte, tanto en la vida activa del deportista como cuando finalizan la actividad”.
Así, se contempla el establecimiento de un plan de apoyo a la salud, un sistema de reconocimientos médicos, se fijan las obligaciones para la práctica deportiva y una nueva configuración de la hasta ahora Agencia Estatal Antidopaje que pasará a denominarse Agencia Española de Protección de la Salud en el Deporte, “que tendrá más competencias, más independencia y más relevancia” y que se encargará de realizar los pertinentes controles, “lo que supone una garantía de independencia frente al modelo actual”.
Además, se refuerza la colaboración y el intercambio de información con las CCAA, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, las autoridades judiciales y las agencias nacionales de otros países.